Windows cumple 30 años, el sistema operativo que amamos odiar

Hoy 20 de Noviembre es el 30º aniversario de Windows 1.0, la primera versión a partir de la cual Microsoft consiguió controlar el mercado.

Windows 1.0 nació cuando la idea de usar una interfaz gráfica era algo innovador, cuando la mayoría de los ordenadores no usaba ratón y todo se hacía con teclado.

En realidad Windows 1.0 era una capa que añadía una interfaz gráfica al verdadero sistema operativo, MS-DOS, que funcionaba originalmente con comandos. Aunque no fue pionero en presentar programas en ventanas de un escritorio, sí que ayudó seriamente a popularizar el concepto.

Celebramos el 30º aniversario de Windows

Los inicios fueron difíciles. Para empezar los requisitos (256K de memoria, una tarjeta gráfica y dos disqueteras) eran demasiado elevados para la época y pocos usuarios pudieron disfrutar del escritorio sin problemas de rendimiento. Y una vez que tenías el sistema necesario, te dabas cuenta de que realmente no era para tanto. Sí, Windows 1.0 permitía la multitarea al tener varias ventanas abiertas al mismo tiempo, pero a la hora de la verdad realmente eso no era necesario.

La mayoría de usuarios ya estaba acostumbrado a la línea de comandos; la posibilidad de ver el reloj constantemente y de usar el Paint al mismo tiempo no eran grandes alicientes para compensar la falta de programas compatibles. Pero al mismo tiempo a todo el mundo le quedaba clara una cosa: era el futuro, nos gustase o no.

Y así ha resultado ser. Windows ha evolucionado mucho desde entonces, deshaciéndose de MS-DOS por el camino y convirtiéndose en la opción por defecto para la inmensa mayoría de compradores de computadoras. Windows 3.0 y 3.1 se convirtieron en auténticas alternativas al trabajo en línea de comandos, y Windows 95 y 98 nos hicieron olvidarnos de ella completamente.

No ha sido un camino de rosas, claro. Windows Millenium introdujo mas bugs que novedades, Windows Vista se disfrazó de moderno pero no pudo convencer a los usuarios de Windows XP, y más recientemente,Windows 8 dejó el escritorio en un segundo plano y aún está pagando por ello.

Y qué decir de la que probablemente es la funcionalidad más famosa de Windows: el pantallazo azul, que salta cada vez que el sistema encuentra un error del que es imposible recuperarse, y eso ocurría una tremenda cantidad de veces dependiendo de la versión o de nuestra suerte. Más que el menú inicio, más incluso que las ventanas, mucha gente aún asocia el pantallazo azul con Windows.

Windows 10 fue lanzado este año, y se habló de que sería la última versión de Windows. Si será porque ya no hará falta cambiar de sistema gracias al nuevo sistema de actualizaciones, o si será porque las ventas de PC siguen cayendo en picado, no lo sabemos. Lo que tenemos claro es que lo ames o lo odies, Windows forma parte de la historia de la informática.